El prófugo de la justicia y suspendido concejal Julio César Vélez González fue visto por última vez en una audiencia pública el pasado 11 de septiembre, cuando el Juez Noveno Penal Municipal de Cúcuta le concedió la libertad.
El administrador de justicia dijo en ese momento que la historia clínica y las entrevistas aportadas por sus defensores daban cuenta de que la bala que mató a María Claudia Castaño Avendaño tenía una trayectoria de derecha a izquierda, lo que “difiere completamente de lo argumentado por la Fiscalía (izquierda a derecha)”.
La argumentada decisión recibió el tajante rechazo de la Fiscalía y los abogados de la familia Castaño Avendaño, quienes apelaron. Diecisiete días más tarde, un juez de segunda instancia entró a mediar y ordenó enviar al investigado, por tercera vez, a la cárcel.
Desde ese 28 de septiembre, el político cucuteño es una especie de fantasma sobre el que se ciernen todo tipo de afirmaciones, las cuales lo ubican incluso en Venezuela.
“Está en una finca del vecino país, donde sus parientes”, aseguran algunos cucuteños que dicen conocer a su familia.
Aunque el señalamiento no parece descabellado por la cercanía con la frontera venezolana, el coronel Álvaro Pico Malaver, comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc), dijo en entrevista a La Opinión hace casi dos meses que no tiene información que apunte en ese sentido.
“No se tiene conocimiento de que haya salido del país”, dijo el oficial el pasado 29 de octubre, sin descartar “una nueva búsqueda con circular roja de la Interpol”. De la existencia de esta orden de captura internacional no se tiene conocimiento, hasta ahora.
Del cabildante también se afirma que “no ha salido de Cúcuta, está en un apartamento escondido”, señalamiento que tampoco ha sido probado ante las autoridades judiciales.
De hecho, sus abogados insisten desde octubre, vía telefónica desde Bogotá, que no se han comunicado con su cliente y que desconocen, además, en dónde pueda estar.
El enigma de su paradero ha dado pie a otra aventurada conjetura: “se ‘voló’, no le va a dar la cara a la justicia”, manifiestan algunas personas al ser consultadas por las calles de la ciudad.
Sin embargo, fuentes que pidieron reserva de su nombre para no intervenir directamente en el proceso judicial, sostienen que Julio César Vélez González se entregará en la víspera de la audiencia de formulación de acusación.
“Está muy demorado el avance de las audiencias y él (el suspendido concejal) espera entregarse cuando no hayan dilaciones injustificadas”, agregaron las mismas fuentes bajo anonimato. “No es su culpa que la audiencia de formulación de acusación se haya demorado”.
El dirigente del partido de la U había quedado prófugo de la justicia, en una primera ocasión, el pasado 1 de agosto y, 20 días más tarde, se entregó por su propia voluntad a las autoridades, que lo buscaban en 190 países.
Si se repite la historia, podría reaparecer públicamente el próximo 28 de enero, fecha en que tendrá que comparecer ante un juez penal del Circuito para que la Fiscalía lo acuse formalmente.
Fuente: La Opinion.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario