El viernes de la semana pasada se reunieron en ureña las autoridades municipales y de tránsito de ambos lados de la frontera.
Las autoridades de tránsito de Cúcuta y de Ureña siguen buscando soluciones que permitan a los taxistas de ambos lados de la frontera circular sin problemas en las dos ciudades.
Para ello, se reunieron por segunda vez en la capital nortesantandereana, en un mesa de trabajo, convocada por el alcalde de Ureña, Nelson Becerra, en la que asistieron por Cúcuta el secretario de Tránsito municipal, Javier Ardila, y el secretario de Gobierno y alcalde encargado de Cúcuta, David Castillo. Además estuvieron presentes representantes de Tránsito Terrestre de San Antonio y Ureña, de la Policía estadal, de la Guardia Nacional Bolivariana y de las empresas de taxis del área limítrofe.
En la reunión, las autoridades de ambos lados de la frontera y los transportadores de Venezuela, acordaron que los taxis de Ureña y San Antonio deberán continuar cumpliendo con la medida de ‘Pico y Placa’ establecida por la Alcaldía de Cúcuta para la zona centrica de la ciudad.
Así, partiendo del cumplimiento del ‘Pico y Placa’, los taxistas venezolanos podrán ingresar a dejar pasajeros a cualquier zona de Cúcuta, siempre y cuando porten el carné que los identifique como miembros de una empresa legalmente constituida, el número de control y la placa del vehículo. En el carnet además deberá especificarse si el conductor es afiliado a la empresa conductor temporal.
También se acordó diseñar una calcomania que deberán tener los taxis venezolanos autorizados para entrar a Cúcuta.
Javier Ardila, secretario de Tránsito de Cúcuta, señaló que para la ciudad es importante ejercer control sobre los vehículos venezolanos teniendo en cuenta que muchos carros ‘piratas’, que se hacen pasar por taxis de Venezuela, ingresan únicamente a vender la gasolina que abastecen en Ureña y San Antonio.
Al respecto refirió que de acuerdo a los calculos que han podido hacer con el respaldo de las autoridades venezolanas, unos 400 taxis del vecino país son los autorizados para trabajar en la frontera colombiana.
Alternativa para el seguro
En la reunión se analizó la posibilidad de establecer un seguro contra todo riesgo que sirva de igual manera para los taxistas colombianos y venezolanos, pues en la actualidad el seguro de responsabilidad civil que se les exige a los transportadores en Venezuela no cubre los accidentes ocasionados en Cúcuta.
Igual situación se presenta con el Soat colombiano en las localidades venezolanas.
Para ellos las autoridades de ambas regiones tendrán un nuevo encuentro donde invitarán a las empresas aseguradoras de la frontera.
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