Juan Manuel Sánchez, 26 años, empleado de una bodega en Cenabastos, fue abordado por dos desconocidos en el frente de su casa cuando arriba en su motocicleta.
En cuestión de segundos, uno de los desconocidos le apuntó con un revólver y le dijo en tono amenazante que necesitaban la moto.
El hurto se produjo en el barrio Motilones, en la ciudadela de Atalaya.
A Mauricio Sierra, de 22 años, estudiante de la Universidad Francisco de Paula Santander, su moto le fue hurtada en las afueras del centro de educación superior, la había dejado parqueada afuera mientras ingresó a recibir clases.
Los dos casos tuvieron características distintas, mientras en el primero hubo intimidación con armas de fuego, en el segundo los delincuentes encontraron abandonado el velocípedo y se lo llevaron sin ninguna resistencia.
Frente a este fenómeno, que en la ciudad y el área metropolitana representa el segundo delito de mayor impacto, luego del hurto de teléfonos celulares, la policía presentó ayer el resultado de una serie de operaciones en las distintas comunas de la ciudad, con miras a desarticular las bandas detrás de este delito.
Cada día, en Cúcuta, los ladrones se roban dos motocicletas.
Los planes se llevan a cabo en talleres de mecánica, parqueaderos y en las vías y a la fecha han arrojado un saldo de 28 motos incautadas, 29 recuperadas y 193 autopartes incautadas.
El comandante de policía, coronel Jaime Barrera, explicó que los investigadores de la Sijín encontraron en los operativos inconsistencias en los sistemas de identificación de las motos y ausencia de documentos que soportaran su legalidad.
Como resultado de los planes de control ejecutados de forma focalizada en las avenidas Las Américas y Juan Atalaya, el barrio Aeropuerto, la Ciudadela La Libertad y la avenida primera del centro de Cúcuta, Barrera reveló que las 28 motos incautadas presentaban sistemas de identificación regrabados y tenían denuncio por hurto en Venezuela y en la Fiscalía de Estructura de Apoyo de Cúcuta.
Las investigaciones que se han realizado frente al hurto de motocicletas, señalan que presuntamente luego de ser robadas, ya sea en la modalidad de atraco a mano armada o halado, en algunos casos son desguazadas para luego comercializar sus autopartes ilegalmente.
También se descubrió que en otros casos son llevadas a otras regiones del departamento y la frontera con Venezuela, comercializándolas con documentos falsos y sistemas de identificación regrabados.
No facilite el robo
Si usted no quiere ser la próxima víctima de las bandas que se decican en Cúcuta al hurto de motos, ponga en práctica estos consejos que da la Policía:
1. No deje su moto abandonada en la calle mientras cumple con diligencias en el centro o en el mercado.
2. Estaciónela en un parqueadero autorizado.
3. No tránsite por vías desplobladas ni oscuras.
4. No deje su moto al cuidado de desconocidos.
5. No compre autopartes en la calle ni en sitios que no están autorizados.
Tomado de la Opinion.com
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