Los estudiantes de la Universidad de Pamplona se declararon en asamblea permanente ante la decisión de las directivas de la institución educativa de suspender el semestre por 28 días.
Mediante una acción de tutela los líderes estudiantiles buscan que un Juez de la República reverse el Acuerdo Nº 06 del 3 de octubre de 2011, emanado del Consejo Académico, el cual suspendió el semestre hasta el 31 de octubre con el fin de reanudar el calendario lectivo el martes 1 de noviembre de este año.
Con la medida se quiere que vuelva la normalidad aun no se haya tenido éxito en la negociación con los miembros del Consejo Superior Universitario ni con su pliego de peticiones que en sus primeros intentos no se concreta.
Como medio de presión y para hacerse sentir, tanto en el ámbito local, como regional y nacional, los estudiantes se organizaron por grupos y se establecieron en diferentes sitios de la ciudad.
Desde el medio día de ayer, igualmente bloquearon con llantas y otros elementos el tráfico automotor en inmediaciones de la salida de la sede principal de la Universidad, la Plazuela Bolívar y el sector de Chapinero.
También estudian la posibilidad de cerrar las entradas y salidas de la ciudad, en lo correspondiente a las vías a Bucaramanga, Cúcuta, Arauca y hacía Málaga (Santander).
Muchas personas no están de acuerdo con esta última medida porque paraliza la ciudad y más cuando cuentan con el respaldo del gremio de transportadores.
Juan Pablo Zapata, miembro de la Alianza Estudiantil Universitaria, aseguró que no estaban de acuerdo con la decisión de suspender por 28 días el calendario académico, ya que muchos estudiantes se verán afectados la medida.
Mediante una acción de tutela los líderes estudiantiles buscan que un Juez de la República reverse el Acuerdo Nº 06 del 3 de octubre de 2011, emanado del Consejo Académico, el cual suspendió el semestre hasta el 31 de octubre con el fin de reanudar el calendario lectivo el martes 1 de noviembre de este año.
Con la medida se quiere que vuelva la normalidad aun no se haya tenido éxito en la negociación con los miembros del Consejo Superior Universitario ni con su pliego de peticiones que en sus primeros intentos no se concreta.
Como medio de presión y para hacerse sentir, tanto en el ámbito local, como regional y nacional, los estudiantes se organizaron por grupos y se establecieron en diferentes sitios de la ciudad.
Desde el medio día de ayer, igualmente bloquearon con llantas y otros elementos el tráfico automotor en inmediaciones de la salida de la sede principal de la Universidad, la Plazuela Bolívar y el sector de Chapinero.
También estudian la posibilidad de cerrar las entradas y salidas de la ciudad, en lo correspondiente a las vías a Bucaramanga, Cúcuta, Arauca y hacía Málaga (Santander).
Muchas personas no están de acuerdo con esta última medida porque paraliza la ciudad y más cuando cuentan con el respaldo del gremio de transportadores.
Juan Pablo Zapata, miembro de la Alianza Estudiantil Universitaria, aseguró que no estaban de acuerdo con la decisión de suspender por 28 días el calendario académico, ya que muchos estudiantes se verán afectados la medida.
Manifestó que hay muchos compañeros que trabajan en diciembre y enero para pagase las matrículas. Añadió que en estos dos meses, por estar estudiando, no tenderán la oportunidad de cancelar las cuotas o créditos al Icetex.
“Siempre hemos planteado la posibilidad de dialogar con la administración (Consejo Superior), para que se solucione lo más pronto posible esta situación y que la otra semana podamos ir a actividades académicas”, sostuvo.
Calificó la suspensión como otro error más que comete la administración de la Universidad de Pamplona y dice que se tomó la decisión sin pensar el impacto económico que generará a la comunidad en general, incluyendo docentes y directivos.
Le pareció extraño que los manden en vacaciones en plena contienda electoral y más cuando ellos necesitan cumplir con este deber constitucional que les da garantías o rebajas del 10 por ciento sobre las matrículas.
Indicó que ante la parálisis académica, muchos estudiantes se ven obligados a viajar hacía sus hogares y no tienen la oportunidad de votar en Pamplona, que es en donde tienen las cédulas inscritas.
“Considero que la administración debe recapacitar y cambiar su decisión”.
Los estudiantes se declararon sorprendidos cuando se difundió el acuerdo que suspendió el semestre y que no se tuvo en cuenta el acuerdo suscrito para reunirse o sesionar nuevamente el 10 de octubre.
“Siempre hemos planteado la posibilidad de dialogar con la administración (Consejo Superior), para que se solucione lo más pronto posible esta situación y que la otra semana podamos ir a actividades académicas”, sostuvo.
Calificó la suspensión como otro error más que comete la administración de la Universidad de Pamplona y dice que se tomó la decisión sin pensar el impacto económico que generará a la comunidad en general, incluyendo docentes y directivos.
Le pareció extraño que los manden en vacaciones en plena contienda electoral y más cuando ellos necesitan cumplir con este deber constitucional que les da garantías o rebajas del 10 por ciento sobre las matrículas.
Indicó que ante la parálisis académica, muchos estudiantes se ven obligados a viajar hacía sus hogares y no tienen la oportunidad de votar en Pamplona, que es en donde tienen las cédulas inscritas.
“Considero que la administración debe recapacitar y cambiar su decisión”.
Los estudiantes se declararon sorprendidos cuando se difundió el acuerdo que suspendió el semestre y que no se tuvo en cuenta el acuerdo suscrito para reunirse o sesionar nuevamente el 10 de octubre.
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