El coronel Carlos Ernesto Rodríguez Cortés, quien en un acto especial realizado en el comando de San Mateo en cabeza del señor mayor general Santiago Parra Rubiano, Inspector General de la Policía Nacional, asumió el comando de la unidad policial que tiene jurisdicción en seis municipios del Área Metropolitana.
El oficial natural de Guasca del departamento de Cundinamarca, llega a la zona fronteriza luego de estar durante un año en Argentina como agregado de la Policía Nacional. Anteriormente por más de dos años se desempeñó como comandante del departamento de Policía Cauca, unidad donde también estuvo como comandante operativo y sub-comandante, respectivamente, de su carrera policial que inició en 1986 cuando ingresó a la escuela de cadetes de Policía General Francisco de Paula Santander, también hace parte su paso por otras unidades policiales como es el caso de las jefaturas de las seccionales de Investigación Criminal en las ciudades de Bucaramanga, Barranquilla y los departamentos de Chocó y Antioquia y también como subcomandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, entre otros cargos.
Su labor policial está enmarcado en el enfoque comunitario que se fortalece con el trabajo operativo adelantando de la mano con otros organismos de seguridad del Estado, la Fiscalía General de la Nación y las autoridades político administrativas, que en este caso pondrá en marcha en los municipios de Cúcuta, San Cayetano, Los Patios, Puerto Santander, El Zulia y Villa del Rosario, para el coronel Rodríguez en la labor policial primero está el ciudadano, el hombre del común, de la calle, en sí todos los hombres y las mujeres que habitan en cada uno de las localidades metropolitanas, por quienes se debe garantizar la protección de sus derechos, principalmente el derecho a la vida, atendiendo oportunamente cualquier acto que ponga en riesgo su integridad, entre ellos los de intolerancia social, ante los cuales se debe reaccionar oportunamente, premisas que soportaran su comandancia, igualmente, atacar la circulación de armas ilegales, el tráfico y consumo de sustancias estupefacientes, este último delito con gran afectación de la población juvenil, el delinquir de las bandas criminales con el apoyo de las Fiscalías Especializadas contra Banda Criminales que llegaron a la ciudad, la extorsión y microextorsión y, los homicidios, buscando en este último su más alta reducción.
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