El accionar de las bandas criminales se paseó por Cúcuta durante 2012 disfrazado de Urabeños, Rastrojos, Bloque Fronteras, Autodefensas Nortesantanderenas Nueva Generación (Ans) y, según habitantes de algunos sectorQes, de Gaitanistas.
La proliferación de estos grupos produjo, al menos, unos 430 homicidios en el área metropolitana, extorsiones, tráfico de drogas y pánico en la comunidad.
Sin embargo, la cortina delincuencial que escondía a 267 de sus integrantes se cayó, quedando al desnudo y, por qué no, en vergüenza pública.
Los sabuesos de la Policía los descubrieron, les siguieron los pasos y lograron sus capturas en ocho confeccionadas y milimétricas operaciones, ejecutadas por hombres de inteligencia e investigación judicial.
Las cifras de capturados, decomisos de armas y municiones, de diligencias de allanamientos y los por menores de cada uno de los golpes fueron confirmados por el coronel Javier Francisco Mora Jiménez, comandante Operativo de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc).
El oficial explica que hubo un incremento del 80% en las aprehensiones, es decir, 119 más que en 2011. Pero también afirma que la institución verde oliva no incluye en su balance el número de detenidos que han recuperado su libertad.
“Los jueces son los que se encargan de definir su situación judicial”, explica Mora Jiménez, al insistir en los resultados positivos que han alcanzado sus hombres.
El seguimiento desarrollado por La Opinión a estos casos dan cuenta de que algunas personas permanecen aseguradas en la cárcel Modelo en medio del hacinamiento. Otras fueron condenadas por aceptar su responsabilidad en diferentes delitos y una reducida cantidad está libre, pero aún siguen vinculadas a las investigaciones por concierto para delinquir.
Las actividades delictivas de las también llamadas “empresas criminales”, como son consideradas en el mundo del hampa, salieron a flote a partir de febrero, con la operación denominada ‘Cazador’.
Los operativos judiciales no se detuvieron ahí, continuaron con las labores de inteligencia denominadas ‘Abril’, ‘Puerto Villamizar’, ‘Tenaza’, ‘Tenaza II’, ‘Machete’, ‘Juan Frío’ y ‘Pescador’.
Esta última fue efectuada en julio y propició la masiva detención de 35 personas, entre las que se contaron uniformados de la propia Policía y una abogada.
El director de la fundación Progresar, Wilfredo Cañizares, había indicado en una entrevista, a mediados del año pasado, que el trabajo de la Policía ha sido importante frente a la delincuencia organizada, pero dejó entrever que el camino para acabarla es aún muy largo y casi imposible.
“Se han golpeado a las estructuras criminales, pero la experiencia nos enseñan que tienen una gran capacidad de reacomodamiento. Han desarrollado una impresionante capacidad de adecuarse y seguir trabajando. Cada vez con mayor nivel de descaro”, explica Cañizares.
OPERACIÓN CAZADOR (Lunes 13 de febrero)
Siete hombres y dos mujeres fueron capturados por integrar una red dedicada al expendio de sustancias alucinógenas con centro de operaciones en el barrio San Luis.
Las investigaciones permitieron evidenciar la forma como estas personas utilizaban diferentes métodos para comercializar base de coca y marihuana, entre ellos la venta personalizada, el narcomenudeo callejero y la entrega a domicilio a través del envío en vehículos y motocicletas.
Se evidenció incluso la instrumentalización de menores de edad en la comisión de esta conducta delictiva. Los utilizaban para el suministro de narcóticos en venta puerta a puerta o llevada en automotores para no despertar sospechas en las autoridades.
OPERACIÓN ABRIL (Sábado 7 de abril)
Condujo a la aprehensión de seis hombres, tres mujeres y tres menores de edad, quienes fueron señalados por las autoridades judiciales de conformar los Urabeños.
La redada se efectuó en dos diligencias de registro y allanamiento en los barrios La Unión, de la ciudadela La Libertad de Cúcuta, y el Chaparral, en el municipio de Los Patios.
El reporte oficial de la Policía dejó al descubierto que dos de los menores se desempeñaban como sicarios. Se trata de “alias El Nené y El Menor”.
OPERACIÓN PUERTO VILLAMIZAR (Martes 17 de abril)
Policías capturaron a siete hombres señalados de integrar las bandas delincuenciales Los Urabeños y Los Rastrojos, quienes además recibieron para ese entonces medida de aseguramiento y fueron trasladados a prisión para ser investigados.
Las detenciones se produjeron luego de que las dos bandas se enfrentaran a bala en la vereda Los Cámbulos, corregimiento de Puerto Villamizar.
En el enfrentamiento resultó un hombre muerto y dos heridos. Las autoridades les incautaron armas, munición, dos camionetas y tres motos.
OPERACIÓN TENAZA (Viernes 20 de abril)
En la vereda Los Reyes del corregimiento de Buena Esperanza de Puerto Santander cayeron 12 hombres y una mujer, señalados por la Policía de integrar la banda criminal de los Rastrojos.
Se encontraban en un campamento, en el que recibieron a bala a los policías 100 uniformados del operativo. No se pudieron fugar por el río Zulia y tampoco hubo personas lesionadas.
La mujer fue vinculada a la coordinación logística y el transporte del grupo delincuencial. Uno de los delincuentes tenía dos órdenes de captura por concierto para delinquir y perteneció a un grupo de las extintas autodefensas del Cesar.
OPERACIÓN JUAN FRÍO (Jueves 3 de mayo)
Luis Fernando Bader Priolo, Cristian David Martínez Donado y un menor de edad fueron detenidos con armamento, además de ser señalados de pertenecer a la banda delincuencial de Los Urabeños.
Los hombres fueron capturados en desarrollo de la Operación Juan Frío en la vereda La Uchema, en el corregimiento de Palo Gordo, Villa del Rosario.
Soldados y e investigadores de la Sijín, Gaula y Goes de la Policía llegaron al sitio, donde hallaron un grupo de hombres que portaba prendas militares y que intentó emprender la huida arrojando varias armas de fuego.
OPERACIÓN MACHETE (Domingo 20 de mayo)
Seis personas, entre ellas un menor de edad, fueron capturadas en allanamientos ejecutados en los municipios de Villa del Rosario y Los Patios, y los barrios Toledo Plata y Trigal del Norte de Cúcuta.
A alias Machete, uno de los aprehendidos, las autoridades lo señalaron de comandar los Urabeños en Villa del Rosario. El menor de edad actuaba como sicario de la organización.
Todos quedaron en manos de la Fiscalía para ser investigados por concierto para delinquir agravado, con fines de terrorismo y con fines de homicidio; y porte ilegal de armas.
OPERACIÓN TENAZA II (Jueves 24 de mayo)
Permitió la captura de tres hombres y la incautación de gran cantidad de armamento, equipos de comunicación satelital y material de intendencia perteneciente a las Autodefensas de Norte de Santander-Nueva Generación.
Las investigaciones apuntaron, en su momento, a que el arsenal era de un narcotraficante vinculado con varias organizaciones delincuenciales en el país.
Se conoció, además, que un delincuente de esa organización estaba reestructurando la banda criminal en Villa del Rosario. Las autoridades judiciales dijeron que estaban recaudando material probatorio para capturarlo.
OPERACIÓN PESCADOR (Miércoles 4 de julio)
Se inició a las 3:00 de la madrugada. Con esta se logró la captura de 35 personas, entre ellas tres policías y una abogada.
Las detenciones se registraron en 16 allanamiento, donde incluso se recapturó un menor de edad que había participado en un homicidio ocho días atrás.
Todos fueron señalados de integrar las Autodefensas Nortesantandereanas Nueva Generación, un reducto de Los Urabeños. Mediante grabaciones telefónicas, testimonios, declaraciones de sus integrantes y material probatorio, la Policía intenta demostrar la participación del grupo en diferentes hechos de sangre.
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