A través de un comunicado, integrantes del Frente Institucional Militar le enviaron un poderoso mensaje a la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), a propósito de las brutales represiones aplicadas recientemente por los uniformados a los manifestantes y ciudadanía en general durante las protestas convocadas por la oposición venezolana:
COMUNICADO
Nosotros, los abajo firmantes, militares integrantes del Frente Institucional Militar (FIM), nos dirigimos respetuosamente a nuestros compañeros activos de la Guardia Nacional de Venezuela en la ocasión de las graves violaciones de Derechos Humanos ocurridas en las recientes protestas y movilizaciones en Caracas y en algunas ciudades del interior.
A comienzos de agosto del remoto año de 1937, el General en Jefe Eleazar López Contreras creó y fundó la Guardia Nacional de Venezuela para llenar un gran vacío en lo referente a la Seguridad Integral de la República. La Institución demostró con el andar del tiempo, su recia capacidad de lucha y sacrificio para realizar con éxito su complejo y arduo trabajo cotidiano, como valiosa e importante cuota de contribución amplia y devota, dinámica y constante al bien común de todos los venezolanos.
En el trajinar de sus hombres y mujeres por las diferentes unidades de la Guardia Nacional, fue constante y reconocida su proverbial lealtad a la institucionalidad republicana, su alta moral y su tradicional mística al servicio de la patria. El honor, que fue, es y será su Divisa, es un gran símbolo en la conciencia de sus efectivos.
La colectividad venezolana por su parte hizo suya la Guardia Nacional como identidad inseparable de su patrimonio espiritual y humano. Dispersa a todo lo largo y ancho de nuestra geografía, en cada puesto, por más lejano e inhóspito que se encontrara, al amanecer de cada 4 de agosto se recordaba el sagrado deber de nuestra institución para con Venezuela, sus instituciones y su pueblo.
Hoy la patria atraviesa una severa crisis de democracia, de libertades y de gobernabilidad, con todas las graves y profundas consecuencias que ello implica. Como lo ha señalado la Doctora Luisa Ortega Díaz, Fiscal General de la República, se ha roto el hilo constitucional y por consiguiente hay un precario Estado de derecho. Ante este complejo panorama el pueblo, único poseedor legítimo de la soberanía popular ha actuado en el marco de la norma constitucional para restablecer el orden y la vigencia de la misma, tal como lo pauta el artículo 5, en concordancia con los artículos 19, 57, 63,130 y muy especialmente los artículos 333 y 350 de la Carta Magna.
Por tradición, la Guardia Nacional ha sido siempre respetuosa de la Constitución Nacional y de nuestro pueblo. De allí que pensemos que nuestra Institución debe conducirse dentro del más exigente respeto de los derechos humanos, y no puede continuar siendo el sostén pretoriano de parcialidades políticas que actúan al margen de la justicia. La Guardia Nacional no puede seguir por el camino espinoso y equivocado que la lleve al desprestigio y hasta el odio de la población, que solo clama y lucha por la paz verdadera, su bienestar, calidad de vida y libertades.
Es el momento de oír a nuestro pueblo: cada día tiene que enfrentar el hambre y la muerte como consecuencia de la ineficiencia de un régimen que, en medio de la corrupción y el despilfarro, dilapidaron miles de millones de dólares provenientes de los altos precios del petróleo. Ésta verdad debe hacerlos a ustedes rectificar. Es el momento oportuno para hacerlo. Recuerden su juramento de servir a la patria y a sus instituciones hasta perder la vida. La Guardia Nacional debe cesar, de una vez por todas y para siempre, esa triste y vergonzosa tarea de reprimir a nuestros hombres y mujeres, que solo exigen pacíficamente la atención de las autoridades y el restablecimiento de la democracia y del Estado de derecho. Recuerden de manera especial a la juventud venezolana, que ha sido atropellada, vejada y lesionada por cumplir con un sagrado deber ciudadano, el de defender las instituciones, la democracia y tener derecho a un mejor futuro.
Esta es una reflexión cordial y respetuosa, pero categórica para todos y cada uno de los Guardias Nacionales, especialmente dirigida al alto mando y a todo el cuerpo de generales, para que recapaciten y actúen de manera irreprochable, correcta y justa, sin atender a intereses bastardos ajenos a nuestra historia de sacrificio y servicio a Venezuela y a nuestro pueblo.
Apreciados compañeros de la Guardia Nacional:
Venezuela espera de ustedes una reacción pronta y favorable, apegada a sus responsabilidades y deberes constitucionales e institucionales para bien de la patria, y de nuestra Guardia Nacional
Caracas, 13 de abril de 2017.
Fuente: Diario la Nación.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario